Excavadores dentales: Eliminación del tejido cariado
Los excavadores dentales son parte fundamental del material odontológico de la consulta de todo dentista. Los excavadores, también denominados “cucharillas” pertenecen al grupo de los llamados instrumentos de un solo componente.
Este tipo de instrumental se llama así porque puede esquematizarse descomponiéndose en tres partes: mango, cuello y parte activa. El mango es la parte por donde se sostiene y el cuello es la zona que une el mango con la parte activa. Esta última, también denominada “cabeza”, puede ser de muchas formas y es la que da nombre al instrumento.
En el caso de los excavadores, son instrumentos que terminan en forma de un pequeño disco plano con el contorno cortante. Pueden ser de forma “discoide” (de disco), “piriforme” (de pera), o bien “cleoide” si tiene una forma o extremo agudo. El principal uso de los excavadores es preparar las cavidades dentarias, principalmente removiendo la dentina careada. También hay excavadores específicos para remover restos del interior de las cavidades óseas, cuya cabeza se denomina “cucharilla para legrados”.
Como gran número de los instrumentos que forma parte del material odontológico, los excavadores proceden del la propia práctica odontológica. Son múltiples los instrumentos empleados en odontología, y están sujetos a normativas y regulaciones internacionales periódicamente actualizadas.
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Excavadores dentales: eliminando caries y preparando cavidades
La finalidad del excavador es practicar una cavidad redondeada, sin ángulos agudos. Inicialmente se realizará con fresas cilíndricas o piriformes, de punta redondeada. El esmalte sin soporte se conservará en parte, y habrá que efectuar entonces un excavado muy cuidadoso bajos las paredes dentarias. Aquí entrarán en acción los excavadores manuales puede ser guiada por una visualización del tejido cariado con soluciones colorantes reveladoras.
La limpieza de la superficie del diente a restaurar, así como de los adyacentes, también es importante en el proceso. Para ello se emplea una copa de goma siliconada y una pasta no fluorada específica para este procedimiento. El objetivo es eliminar la placa, el tártaro sobrante y los restos del fresado. La adhesión posterior deberá realizarse sobre una superficie perfectamente limpia.
Después de este paso se procederá a la elección del color, justamente antes del aislamiento del campo operatorio. Es posible que la superficie del esmalte sufre deshidratación durante el proceso, modificando el color natural del diente.
Mejorando los procedimientos odontológicos
En la odontología restaurativa la excavación del tejido dental cariado es muy importante. Su cometido principal es la eliminación del tejido afectado para frenar la progresión de la caries, eliminando la dentina necrótica reblandecida. A partir de ahí se procederá a dar el soporte más adecuado que permita la restauración del diente.
Para eliminar caries se emplea tradicionalmente piezas para fresado de alta y baja velocidad, así como los excavadores manuales. Los últimos avances han supuesto conocer con más detalle y mejorar el procedimiento para su tratamiento. Esto incluye el material odontológico y las técnicas de remoción para que el procedimiento sea lo menos invasivo posible.